El joven delincuente tiene 23 años de edad y se dedicaba al micro tráfico de droga y en cometer asaltos a mano armada.
REDACCIÓN CENTRAL/TINTA ROJA
En una operación conjunta liderada por la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELC-N) y los Fiscales de Sustancias Controladas, se llevó a cabo un mandamiento de allanamiento en un inmueble del Barrio San Bernardo en Tarija, arrojando luz sobre un caso de tenencia ilícita de arma de fuego. La inusual situación toma un giro sorprendente al descubrirse que la madre del implicado no tenía conocimiento de las actividades de su hijo.
El hecho ocurrió el pasado 18 de julio a las 11:00 a.m., cuando el personal policial y los fiscales, bajo la dirección de la Tte. Rosmery Quispe, ejecutaron el mandamiento de allanamiento N°15/2023. La orden judicial fue emitida por Miguel Ángel Calizaya, Juez del Juzgado Público de Familia e Instrucción Penal Primero, y tenía como objetivo un inmueble en construcción ubicado en la calle Dora Ponce del Barrio San Bernardo.
En el lugar, las autoridades notificaron a Serafina Acuña Torres, propietaria del inmueble, sobre el procedimiento en curso. Durante la requisa, la atención se centró en el dormitorio de su hijo, Jonathan Yerri Copi Acuña, de 23 años de edad y albañil de ocupación.
La sorpresa llegó cuando en medio de la búsqueda, los funcionarios policiales encontraron un arma de fuego calibre 9 milímetros cuidadosamente escondida en el interior del ropero, junto a una maleta. El arma, identificada como una marca TAURUS con número de serie TYB 60792, estaba acompañada de un cargador conteniendo cinco municiones.
Las autoridades procedieron con la aprehensión de Copi Acuña, quien fue trasladado a las oficinas de la FELC-C para el proceso correspondiente. El caso fue presentado al Ministerio Público para su evaluación y seguimiento legal.
Uno de los aspectos que resalta en este caso es la revelación de que la madre del implicado, Serafina Acuña Torres, no tenía conocimiento de la tenencia ilícita de arma de fuego por parte de su hijo. La noticia sorprendió a la comunidad local, poniendo de manifiesto el contraste entre la vida cotidiana de una familia y las acciones individuales que pueden permanecer ocultas hasta que las autoridades toman medidas para esclarecer la situación.
Este incidente subraya la importancia de la cooperación entre las fuerzas de seguridad y la comunidad en la lucha contra la delincuencia y el tráfico de armas ilegales, mientras la población se mantiene alerta ante situaciones que puedan poner en riesgo la seguridad pública.
